Un terremoto o seísmo es un movimiento brusco de la corteza terrestre, más o menos intenso, causado por la dinámica interna de nuestro planeta. La mayor parte de los terremotos se originan en zonas donde se produce el contacto entre dos placas, aunque pueden causar efectos en lugares bastante alejados.
El origen en los terremotos suele estar en las tensiones que se producen en la corteza, debido a la subducción, el choque de placas continentales y la fricción en un límite transformante.
Cuando estas tensiones se descargan, se produce el movimiento que nosotros conocemos como terremoto. El punto del interior de la tierra en el que se origina un terremoto se llama hipocentro. Es allí donde se han estado acumulando tensiones y, donde, de repente, se liberan provocando la perturbación.
En la superficie terrestre, el punto donde primero se percibe el terremoto es el epicentro. Es el punto de la superficie más próxima al hipocentro.
Según la profundidad a la que se origina un terremoto, podemos distinguir tres tipos: los superficiales, el hipocentro está entre unos 10 y unos 20km. Los intermedios, donde el hipocentro se encuentra entre los 20 y los 70km. Y los profundos, que el hipocentro está hasta 700km por debajo de la superficie.
El origen en los terremotos suele estar en las tensiones que se producen en la corteza, debido a la subducción, el choque de placas continentales y la fricción en un límite transformante.
Cuando estas tensiones se descargan, se produce el movimiento que nosotros conocemos como terremoto. El punto del interior de la tierra en el que se origina un terremoto se llama hipocentro. Es allí donde se han estado acumulando tensiones y, donde, de repente, se liberan provocando la perturbación.
En la superficie terrestre, el punto donde primero se percibe el terremoto es el epicentro. Es el punto de la superficie más próxima al hipocentro.
Según la profundidad a la que se origina un terremoto, podemos distinguir tres tipos: los superficiales, el hipocentro está entre unos 10 y unos 20km. Los intermedios, donde el hipocentro se encuentra entre los 20 y los 70km. Y los profundos, que el hipocentro está hasta 700km por debajo de la superficie.
Ondas sísmicas
La perturbación que supone un movimiento sísmico se propaga por el interior de la tierra en forma de ondas sísmicas. Éstas son de diferentes formas según su forma de transmisión y sus efectos.
En un terremoto de distinguen varios tipos de ondas. Podemos distinguir las ondas que se transmiten por el interior terrestre, llamadas ondas primarias y secundarias y las superficiales. Las ondas primarias se originan en el hipocentro, las superficiales en el epicentro.
Las ondas que causan las catástrofes asociadas a los terremotos son las ondas R (Reyleight) y
las L (lowe).
Evaluación de los daños
Existen dos escalas para cuantificar la potencia de los terremotos.
La más antigua es la de Mercalli, que establece una serie de grados que están relacionados con la percepción que las personas tienen del temblor y los efectos apreciables del entorno.La escala de Richter, es más científica, del 1935. Es una escala de magnitudes que se basa en calcular el grado a partir de los datos obtenidos en los sismógrafos. La magnitud se calcula dividiendo la amplitud de las ondas sísmicas registradas en el sismógrama por el periodo de estas ondas. El sismógrafo debe estar a 100km del epicentro.
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